¿Qué hay de nuevo en Los Ángeles?

Si Los Ángeles no era la ciudad preeminente del sushi del país, ahora lo es. Sushi Tama, Morihiro y Kinkan son algunos establecimientos de esta modalidad de los de más alta gama, con menús de degustación curados por chefs. Estos locales abrieron durante la pandemia y ganaron fanáticos con órdenes para llevar tan exuberantes que brillaban como joyas. Ahora, se puede comer directamente en sus barras pero debe planificar con anticipación: los asientos en el mostrador de Kinkan, donde las cenas van de US$125 a US$250 por persona, pueden ser difíciles de conseguir.

El movimiento Black Lives Matter atrajo una atención renovada a los negocios propiedad de afrodescendientes de Los Ángeles, en especial a los restaurantes. Los críticos están entusiasmados con Berbere, un restaurante vegano de inspiración etíope que abrió sus puertas en Santa Mónica en 2021 (la mayoría de los platos cuestan menos de US$20), y sería difícil encontrar un café con leche más hermoso que el que se sirve en Bloom & Plume, una cafetería que el célebre florista Maurice Harris abrió junto a su floristería. Varios sitios web ofrecen guías de los mejores restaurantes propiedad de afros en la ciudad; Thrillist es bastante robusto.

Al diablo con los clichés bajos en carbohidratos, la pizza está teniendo su momento. Pastel tras pastel sale volando de la cocina abierta de Mother Wolf, el nuevo restaurante más concurrido de Hollywood (entre cuyos fanáticos están Rihanna y Michelle Obama). El restaurante ocupa un hito dorado del art déco: el edificio Citizen News ( “si entrecierras los ojos, es casi como si estuvieras en Nueva York”, se dice). En el centro, De La Nonna sirve pasteles al estilo de la abuela (US$16 y más) y negronis crujientes. En Echo Park, en el este de la ciudad, Grá argumenta a favor de la pizza como alimento saludable, con su base de masa madre orgánica, “fermentos de temporada” (kimchi, ensaladas de pepino encurtido) y vino natural, que, por cierto, ha inspirado a tantos nuevos bares.