Armenia: Corazón del Quindío

Historia, cultura, naturaleza y una buena taza de café son el sello de una ciudad que es mucho más que la antesala a la aventura verde que buscan los visitantes del Eje Cafetero colombiano.

Por Vicky Santana

Fotos: Andrés Mayr

Con su biodiversidad, arquitectura y paisajes verdes, Armenia ofrece una experiencia única que combina historia, naturaleza y aventura, mientras se disfruta de la cálida bienvenida de su gente.

Aún somnolienta, el olor a café quindiano recién preparado me invita a despertar por completo. No puedo esperar para probar en la ciudad de Armenia, corazón del Eje Cafetero, cualquiera de las delicias de su café. Esta experiencia olfativa y gustativa es, sin duda, el abrebocas ideal para conocer la capital del departamento del Quindío, antes de explorar sus alrededores.

Conocida como la Ciudad Milagro, Armenia es un destino que encanta con su rica cultura cafetera y su vibrante historia. En el corazón de la ciudad se encuentra la Plaza de Bolívar, punto de encuentro emblemático para lugareños y turistas por igual. Rodeada de locales donde se sirve el famoso café quindiano y flanqueada por edificios significativos como la Gobernación del Quindío y la catedral de la Inmaculada Concepción, la plaza es un excelente punto de partida para recorrer la ciudad.

¿Por dónde comenzar?

El Museo del Oro Quimbaya es un destino cultural imperdible en la ciudad. Exhibe una vasta colección de artefactos de oro, cerámica y esculturas de la cultura quimbaya. Sorprende también su edificio, diseñado por el laureado arquitecto Rogelio Salmona.

También en el corazón de la ciudad, el Parque de la Vida ofrece un espacio de naturaleza y cultura, con actividades y eventos durante todo el año. Este oasis ecoturístico cuenta con senderos adoquinados para los caminantes, cascadas artificiales, puentes de guadua, concha acústica para espectáculos culturales, patinódromo y un lago central donde pasean aves en total libertad.

El Centro Cultural La Antigua Estación del Ferrocarril, que funciona en un histórico edificio de 1927, y el Teatro Azul, con su diversa programación de teatro, danza y música, son epicentros de la cultura citadina.

Direcciones

Plaza de Bolívar

Entre las calles 20 y 21 y las carreras 13 y 14.

Museo del Oro Quimbaya

Avenida Bolívar n.° 40 norte – 80, en la rotonda del Ferrocarril.

Parque de la Vida

Avenida Bolívar con calle 6 norte.

Antigua Estación del Ferrocarril

Intersección de la carrera 19A con calle 26

Teatro Azul

Carrera 13 con calle 11

Entre platos y tazas de café

La cocina de la zona cafetera incluye maíz, fríjol, plátano, arroz, chorizo y chicharrón, al igual que pescados como trucha y mojarra. Pero no todo es bandeja paisa en Armenia, allí los visitantes pueden deleitarse con fusiones contemporáneas y platos internacionales en restaurantes como La Fogata, Café Gourmet Quindío, Rancho Edén, Donde Juan B, El Solar, Icónico Terraza, Mariajuana Ale House y El Silo, este último ampliamente reconocido por la creatividad de su alta culinaria.

¿La hora del café? Pues en Armenia el café no es solo una bebida; es el pilar económico de la región y, sobre todo, una expresión cultural y una pasión que los armenios intentan contagiar a los visitantes. Si quiere hacer parte, no deje de visitar Expedición Café (calle 5N n.° 18-00), una de las alternativas para conocer sobre el trabajo y la producción de las fincas cafeteras de Quindío, que termina con una cata de cinco variedades de café tostado.

Para elegir un restaurante, consulte la guía gastronómica guiayipao.co, diseñada por la alcaldía municipal y ACODRES, entidad que rige el gremio gastronómico.

Tour de pueblos

El verde es un color que simboliza la vida y la naturaleza. En el paisaje quindiano, este color se manifiesta en una amplia paleta. El viaje de Armenia a Salento ofrece una vista espectacular de esta diversidad cromática, con una vegetación exuberante que incluye cafetales y platanales.

Salento, conocido por su arquitectura tradicional y su vibrante Calle Real, es la puerta de entrada al Valle del Cocora, donde las palmas de cera se elevan majestuosamente hacia el cielo, creando un paisaje dinámico que cambia al antojo de la niebla.

Filandia, a veinte kilómetros de Salento, es un municipio destacado por su rica cultura, sus artesanías en fibras naturales y sus hermosos paisajes cafeteros. El Mirador de la Colina Iluminada ofrece vistas panorámicas desde 27 metros de altura, incluyendo la parroquia Inmaculada Concepción. La Calle del Tiempo Detenido es notable por sus casas históricas bien conservadas. Para una pausa en la que el visitante puede recargar baterías, una buena opción es el Restaurante Helena Adentro, con su cocina innovadora, o el Restaurante José Fernando, conocido por su extensa carta y la encantadora arquitectura colorida de su casona.

Muy cerca de Armenia, fincas como El Ocaso, en Salento, y Terraza Café Concorde y Café San Alberto, en Buenavista, ofrecen tours y degustación de sus variedades de café.

Cuando el café se convierte en atracción

Por otro lado, los amantes de la naturaleza y la cultura cafetera encuentran destinos como PANACA, el Parque del Café y el Parque Los Arrieros, que permiten sumergirse en la vida rural y entender la importancia del café en la cultura local. Con actividades como recorridos en carreta y canopy, y la oportunidad de interactuar con una gran variedad de animales y plantas, estos parques temáticos ofrecen diversión y educación para toda la familia. Además, el Jardín Botánico del Quindío invita a explorar la biodiversidad de la región, haciendo de esta zona un lugar ideal para la aventura y el conocimiento del entorno natural.

Si lo que desea es conocer haciendas, La Finca El Ocaso, Terraza Concorde y el Café San Alberto son ejemplos de lugares donde se puede aprender con mayor detalle sobre el proceso de cultivo y producción del café, y disfrutar de una taza preparada por expertos. Estos lugares no solo brindan un café excepcional, sino también vistas impresionantes del paisaje cafetero y la oportunidad de sumergirse en la cultura local. La pasión y dedicación de los productores de café del Quindío se reflejan en cada taza, dejando un recuerdo imborrable en quienes visitan esta tierra.