Plantas medicinales: hierbas para el hierbatero
Texto y foto: Javier A. Pinzón
En mis recuerdos de infancia veo a mi abuela entrar a mi habitación con una taza humeante de agua de yerbabuena. Sucedía cuando un dolor de estómago me había impedido ir a la escuela y ahora tengo la sensación de que, pese al dolor, sentía un pequeño placer por los mimos de mi abuela y ese aroma que inundaba toda la casa y que aún hoy, no importa donde me encuentre, trae a mi mente esa mano cariñosa que arrulló mi infancia.
Ella lo curaba todo con tisanas. Ofrecía agua de jengibre para la congestión nasal o las molestias musculares, y de manzanilla para el dolor de cabeza. Y para surtir su farmacia doméstica tenía en la azotea un pequeño huerto con los “indispensables” que le había enseñado su abuela, quien a su vez había aprendido también de su respectiva abuela.
Han pasado años y mucha agua ha corrido bajo el puente, pero ahora que me dedico a la ciencia creo cada vez más en el conocimiento tradicional de mi abuela cuando veo que las farmacéuticas se apoyan en la medicina tradicional en busca de principios activos que puedan transformar en medicamentos. Es esa la razón por la cual llamó mi atención la colección de hierbas medicinales del Jardín Botánico de Bogotá, de donde extraje estos apuntes.
Achillea millefolium
La Achillea fue nombrada en honor de Aquiles, quien durante la guerra de Troya curó a muchos de sus soldados utilizando esta planta que detiene las hemorragias. También llamada comúnmente milenrama, maquilla o hierba de Aquiles, es una planta herbácea. Posee múltiples propiedades medicinales: antiinflamatoria, cicatrizante (contribuye a la curación de las contusiones), hemostática (cohíbe las hemorragias por acción vasoconstrictora o por la aportación de factores coagulantes), antiséptica (destruye los gérmenes o impide su desarrollo) y tonificante (ejerce una acción restauradora y fortificante sobre el organismo), entre otras.
Taraxacum campylodes
La Taraxacum (más conocida como diente de león) es una hierba floral común, que de hecho es considerada por muchos como una molestia o “mala hierba”. No obstante, durante siglos ha sido usada para sanar y prevenir enfermedades, pues mantiene el correcto funcionamiento del hígado, combate el acné y el eczema, mejora la salud de los ojos y ayuda a bajar de peso. Estas propiedades se deben a su contenido de ácidos fenólicos, inulina y sales minerales, entre otras sustancias benéficas para la piel. En algunos períodos de escasez, la raíz seca se ha utilizado como sustituto de la achicoria, que a su vez reemplaza al café.
Tanacetum parthenium
Conocida comúnmente como matricaria, es una planta perenne, herbácea, aromática y medicinal perteneciente a la familia de las compuestas. Reduce la fiebre (tal como su nombre lo indica en inglés: feverfew), mitiga el dolor de cabeza, la artritis y los problemas digestivos. Sus ingredientes activos incluyen partenolida y tanetina.
Verbascum thapsus
Popularmente llamado verbasco o gordolobo, es una especie de la familia scrophulariaceae natural de Europa, Asia occidental, áfrica, Norteamérica y el Himalaya. Crece en terrenos incultos, taludes y praderas secas. Las flores tienen un pigmento amarillo que las mujeres romanas utilizaban para teñirse el cabello de rubio. Esta planta se utiliza como expectorante, contra el asma y la bronquitis. Por su acción expectorante y mucolítica es empleada para curar el tabaquismo en tintura madre o dilución homeopática. Los fomentos de la planta se utilizan contra las hemorroides.
Salvia officinalis
La salvia es una especie herbácea de la familia de las lamiáceas. Su nombre científico proviene del latín salvare, que significa “salvar”. Tal vez por eso en México es considerada una planta sagrada. Tiene muchas propiedades medicinales como antisudorífica, hipoglucemiante, emenagoga, estimulante, antiespasmódica, astringente y antiséptica. En la medicina tradicional austríaca es administrada por vía oral, como infusión o masticada, para el tratamiento de enfermedades del sistema respiratorio y gastrointestinal, la boca y la piel.
Symphytum officinale
Comúnmente llamada consuelda, esta planta se destaca como una de las mejores soluciones tradicionales para curar las heridas. Su nombre procede del latín consolida, que significa consolidar o unir. Los antiguos le pusieron este nombre porque creían que servía para unir los huesos rotos y soldar las heridas. Esta capacidad para favorecer la cicatrización de las heridas e impedir el sangrado viene determinada por su riqueza en alantoína, que en sus raíces tiernas puede llegar hasta el 1,5%. Por tal razón, este componente aparece en la lista de ingredientes de muchas pomadas destinadas al cuidado de la piel. Por otra parte, debido a su alto contenido de mucílagos (hasta un 30%), actúa como demulcente; es decir, alivia la irritación, la inflamación y el dolor de las mucosidades.
Ruta graveolens
Durante milenios, la Ruta graveolens (más conocida como ruda) ha cumplido una función importante en la sabiduría medicinal natural y popular. Históricamente, la ruda ha sido utilizada para aliviar el dolor asociado con los síntomas físicos de la gota, el reumatismo y la ciática, además de reducir los efectos incómodos de gases y cólicos e incluso inducir la menstruación. También se utiliza como un tónico digestivo y para estimular el apetito. La hierba es comestible y de uso frecuente en ensaladas. Es una buena fuente de flavonoides.
Lepidium sativum
También conocido como berro de jardín o mastuerzo, es una planta anual que llega a medir hasta cincuenta centímetros de altura, perteneciente a la familia de las crucíferas, originaria del oeste de Asia, pero ampliamente extendida por todo el mundo. El mucílago de la semilla se ha utilizado para aliviar la irritación de la mucosa intestinal en pacientes con disentería amebiana o diarrea. El berro de jardín se emplea para curar en enfermedades bronquiales, especialmente asma (hiperreactividad bronquial), bronquitis y otras enfermedades productoras de tos. También se usa en hemorroides sangrantes. Las semillas sirven como estimulante de la lactancia materna o la menstruación y también como diurético, para curar enfermedades de la piel, episodios febriles de diversos orígenes. Las hojas combaten el escorbuto.
Aloe vera
La sábila es una de las plantas más famosas gracias a los beneficios que tiene para la salud, la belleza y el hogar. Entre sus propiedades podemos mencionar que es un calmante, cicatrizante, humectante y regenerador, también es anti-inflamatorio, ideal para reducir problemas como el acné, pues actúa como depurativo, desintoxicante, favorece la digestión y regula la glucosa del organismo. Funciona como un potente antiviral y contiene muchos aminoácidos, tales como el ácido glutámico, aspártico, alanita, arginina y glicina, entre otros.
Viola odorata
La violeta común o viola es una especie del género Viola nativa de Europa y Asia e introducida en toda América. También se la llama violeta de jardín o “huésped no invitado” en campos sombreados y jardines. Es una pequeña planta herbácea que alcanza los quince centímetros de altura, sin tallo, con una raíz perenne y carnosa. Es utilizada tradicionalmente para curar afecciones respiratorias (resfriado, gripe, bronquitis, faringitis, asma…), afecciones del aparato digestivo (gastritis o úlcera gastroduodenal). En dosis elevadas es emético y discretamente laxante.
Mentha rotundifolia
También llamada mentrasto, es una hierba que alcanza el metro de altura, caracterizada por sus hojas ovales, gruesas y rugosas. Lo que más destaca de esta planta es su fuerte y desagradable olor, por lo cual no es tan apreciada como otras más fragantes, quedando reservada para uso medicinal. La infusión de sus hojas es un poderoso remedio para reducir la fiebre. Para calmar las palpitaciones cardíacas se emplean unas gotas de su esencia diluidas en agua caliente, y una compresa con la cocción de hojas y flores alivia dolores reumáticos y picaduras de insectos.
Clinopodium brownei
El poleo es una planta perenne perteneciente a la familia de las lamiáceas, con tallos cuadrados y extensas hojas opuestas. Esta hierba es muy pubescente en el vástago y el interior y exterior del cáliz. En Quintana Roo, México, lo utilizan contra el cólico. Así mismo, en Yucatán se usa la decocción de esta planta para tratar problemas estomacales. En otros países la aprovechan para combatir la gripe y los problemas hepáticos.
Cinnamomum camphora
Conocido como alcanfor, es un árbol de la familia de las lauráceas que se utiliza como ornamental y medicinal. Antiguamente de esta planta se extraía el alcanfor, hasta que se comenzó a extraer sintéticamente. Son bien conocidas las aplicaciones medicinales del alcanfor, que sirve como antiespasmódico, anafrodisíaco, antipútrido, antiséptico, excitante, antiherpético, antiamenorreico, antiasmático, cicatrizante y odontálgico. Se administra en las fiebres nerviosas y en las eruptivas; se recomienda en las neuralgias, blenorragias dolorosas y dolores reumáticos, en forma de fricciones.
Piper bogotense
Esta planta (más conocida como cordoncillo) tiene las flores y los frutos diminutos. Estos frutos son consumidos por varias especies de aves del bosque, incluyendo algunas tan vistosas como el clarinero (Anisognathus igniventris). Los frutos de los cordoncillos también son un alimento favorito de algunos murciélagos. Tiene varios usos tradicionales: las hojas, en infusión o trituradas, son empleadas como hemostáticas o para tratar afecciones renales. Es una especie pionera apta para la protección de nacederos y cursos de agua.
Equisetum arvense
También llamada cola de caballo, es una planta rizomatosa perenne de la familia de las equisetáceas de hasta sesenta centímetros de altura. Planta criptógama (carente de hojas y flores), la cola de caballo o equiseto se ha utilizado en infusiones con propiedades diuréticas. Además aporta un elevado contenido en silicio y se recomienda su ingestión como remineralizante. Otro uso muy reconocido en los remedios caseros con esta planta son sus propiedades como hemostática, para frenar las hemorragias, tanto en uso externo como interno.
Malva sylvestris
Es una hierba perenne que produce uno o más tallos y puede medir de cuarenta centímetros hasta más de un metro de altura. La malva es una planta con reconocidas propiedades curativas desde hace mucho tiempo. Las hojas y las flores son las partes de la planta que contienen principios activos y sustancias beneficiosas para la salud. Las propiedades medicinales de la malva más relevantes son: antiinflamatoria, laxante, demulcente, emoliente, digestiva, antidiarreica, expectorante, cicatrizante y diurética. Ayuda en afecciones de la piel como forúnculos y granos, heridas, úlceras, llagas, quemaduras solares y de otro tipo, abscesos, hemorroides, eczemas, dermatitis y picaduras de insectos.